La urgencia de una respuesta colectiva

La sequía en Eivissa no es solo un desafío ambiental, sino también una llamada a la acción colectiva. Ante este escenario, el Ayuntamiento de Sant Josep se compromete a tomar medidas decisivas para garantizar una gestión sostenible del agua, preservando así el patrimonio natural de la isla, el bienestar de sus habitantes y su prosperidad económica.

Ante la importancia de una gestión sostenible del agua, especialmente en territorios insulares, el Ayuntamiento de Sant Josep de sa Talaia aprobó en el año 2016 la Ordenanza municipal para el ahorro de agua, que tiene como objetivo fomentar los sistemas de ahorro de agua en viviendas, edificios, construcciones y zonas verdes, entre otros aspectos. Puedes consultar el texto de la Ordenanza aquí.

Alianza por el Agua: compromiso y acción institucional

En la isla de Ibiza, hay que destacar el papel imprescindible de la Aliança per l’Aigua, una entidad donde instituciones, empresas y particulares unen esfuerzos para conseguir una gestión eficiente y sostenible del agua en Ibiza y Formentera. Entre las actuaciones que promueve la Aliança, cabe destacar el Pacto por el Agua de Ibiza, compuesto por 20 medidas estratégicas. Este pacto abarca desde la garantía de un abastecimiento de agua de calidad hasta la promoción de la reutilización de agua depurada para usos agrícolas, urbanos y ambientales. Las instituciones públicas, junto con empresas, asociaciones y ciudadanos, se comprometen a trabajar de manera conjunta y transparente para alcanzar estos objetivos y enfrentar los riesgos de la sequía.

Puedes ampliar todo el contenido del pacto aquí.

Consejos prácticos para la ciudadanía: cada gota cuenta

Además de las acciones institucionales, es vital que cada individuo adopte prácticas sostenibles en su vida diaria. Al igual que las 3 R en materia de residuos, para una gestión sostenible del agua podemos hablar de ACR:

• Ahorro: llevar el gasto al mínimo necesario mediante medidas como la reparación de fugas, uso de dispositivos de bajo consumo, todas las medidas que lleven a un hábito de consumo consciente y responsable para disminuir el gasto.
• Control: el control del consumo de agua se logra mediante la instalación de medidores que permiten monitorear y gestionar su uso eficientemente, identificando posibles fugas o excesos. Establecer metas de consumo ayuda a tomar conciencia y reducir el uso innecesario de agua.
• Reutilización: por ejemplo, la reutilización de aguas grises procedentes de duchas, sistemas de recolección de agua de lluvia para usos no potables, tratamiento y reutilización de aguas residuales en industrias y agricultura, todas estas medidas promueven un ciclo de vida del agua más eficiente y sostenible, alargando su utilidad.

Os dejamos algunos consejos para ahorrar agua:

• Conciencia individual: siempre que uses agua, recuerda que es un recurso preciado y limita su uso al mínimo necesario.
• Prefiere duchas breves: opta por duchas en lugar de baños. Una ducha consume considerablemente menos agua que un baño. Una persona gasta de media unos 50 litros en una ducha de cinco minutos, una cifra que se cuadruplica en caso de que se tome un baño, ya que llenar la bañera supone un gasto de 200 litros de agua. ¡Y recuerda, la ducha compartida es más divertida!
• Cierra el grifo: al lavarte los dientes o afeitarte. Usar un vaso para enjuagarte puede reducir significativamente el consumo de agua.
• Reparación de fugas: un grifo que gotea puede malgastar miles de litros al año. Revisar y reparar las fugas es esencial para la conservación del agua.
• Lavado eficiente: llena completamente la lavadora y el lavavajillas antes de usarlos. Evita prelavados innecesarios y considera el uso de programas económicos.
• Obtén agua fresca sin desperdicio: en lugar de dejar correr el agua para que salga caliente, aprovecha esta agua previa, guárdala para regar o fregar el suelo.
• Dispositivos ahorradores: instala reductores de caudal y aireadores en grifos y duchas para reducir el consumo sin sacrificar el confort. Son dispositivos que mezclan el agua con aire reduciendo el caudal de agua y permiten un ahorro de entre el 40% y el 60% de agua.
• Electrodomésticos eficientes: al reemplazar electrodomésticos, elige modelos con alta eficiencia energética y de agua.
• Riego inteligente: si tienes jardín, riega durante la noche o por la mañana temprano para minimizar la evaporación.
• Recoge el agua de lluvia: instala un sistema de recolección de agua de lluvia en tu hogar para regar plantas o limpiar exteriores. Esta práctica no solo ahorra agua potable, sino que también aprovecha un recurso natural gratuito.
• Elige plantas resistentes a la sequía: si tienes jardín, opta por plantas nativas o resistentes a la sequía. Estas plantas requieren menos agua y son más adecuadas para climas áridos o temporadas secas.
• Monitoreo y control: instala sistemas de monitoreo de agua que te permitan detectar y controlar el consumo en tiempo real. Algunos sistemas avanzados incluso te alertan sobre fugas o sobreconsumo, permitiéndote actuar rápidamente para corregir el problema.
• Aprovechamiento de aguas grises: las aguas de ducha y de algunas pilas pueden aprovecharse para el riego, la limpieza o hasta para los inodoros. Hoy en día existen sistemas fáciles y económicos que permiten ahorrar mucha agua. Una descarga de inodoro, por ejemplo, supone unos 20 litros de agua.

Hacia una gestión integral del agua

La gestión del agua en tiempos de sequía requiere de un enfoque integral, que involucre tanto a las instituciones como a cada ciudadano. La colaboración, la innovación y la concienciación son fundamentales para preservar este recurso vital. Desde la participación en iniciativas institucionales hasta la adopción de prácticas sostenibles en el hogar, cada acción cuenta.

Para obtener más información sobre el Pacto por el Agua y cómo puedes contribuir, visita Aliança per l’Aigua.